Este suele ser el primer procedimiento necesario para curar un quiste pilonidal, ya que el absceso es el primer signo de la enfermedad. Su propósito es aliviar la infección que ha quedado atrapada debajo de la piel, generando un intenso dolor en el paciente.  También se le denomina “lanceta” o “incisión y drenaje”

Este es el tratamiento más utilizado para un quiste infectado. Consiste en un procedimiento simple, realizado de forma ambulatoria en la consulta, que implica la administración de anestesia local para insensibilizar la piel, antes de proceder a la realización de una incisión en el quiste para drenar el líquido y el pus, después de lo cual se rellena con una gasa (que se cambia periódicamente) y se deja abierto hasta que sane, en 4 semanas aproximadamente.

Es el procedimiento que consiste en extirpar el tejido enfermo y coserlo, esperando que sane en los próximos días. Se trata de una operación bastante simple, pero puede ser decepcionante; ya que puede parecer que va a sanar bien en las siguientes horas y luego se separa, generalmente que se atribuye a la infección, pero ese no suele ser el caso; puesto que se deshace porque está abajo en la hendidura. En estos casos, es posible que se necesite un cuidado prolongado de la herida para que sane.

En otros casos suele aplicarse solo una escisión del quiste pilonidal, lo cual significa que se elimina el área enferma, pero no se intenta cerrar la herida. Por el contrario, se deja curar por sí sola, lo que suele tardar unos meses (cicatrización secundaria). Para ello, el paciente requerirá cambios frecuentes de apósitos o  empaques para ayudar a cerrar.

Es una operación popular entre los cirujanos, ya que los pacientes y los cirujanos no sufren la decepción cuando una herida cerrada se separa una o dos semanas después de la cirugía primaria. En tal caso, el cirujano comprende que las heridas en la hendidura glútea no suelen sanar con facilidad, y al dejarla abierta lo está aceptando. 

Otro procedimiento aplicado para tratar el sinus pilonidal es el Pit Picking u Operación de Bascom, el cual consiste en hacer pequeñas incisiones alrededor de los poros de la línea media y eliminar los pequeños tractos sinusales, que se abren camino debajo de la piel. Se complementa con una segunda incisión a un lado y, a través de ella, se barren los pelos o restos. 

Es recomendado para enfermedad mínima o comenzando, ya que dependiendo de la severidad del caso, puede no resultar 100% efectivo. En ciertos casos no funciona, toda vez que la hendidura glútea profunda permanece y, a menudo, se desarrolla una nueva enfermedad pilonidal.

Por otro lado, encontramos otros procedimientos más nuevos que pueden o no resultar exitosos para el tratamiento de la enfermedad pilonidal, tal como el EPSIT. Con este método se coloca un pequeño endoscopio en la abertura del tracto sinusal y se eliminan los vellos y el tejido inflamatorio. 

Básicamente, es una variación del tratamiento de pit picking y aunque sus indicaciones, también tiene sus limitaciones. Por ejemplo, no aplana la hendidura, por lo que no soluciona el problema principal.

En este procedimiento, se extirpa el área de la enfermedad y se extrae piel de otra parte del cuerpo, para injertarla sobre la herida. En tal caso, aun cuando las operaciones para la enfermedad pilonidal suelen ser de forma ambulatoria, este puede requerir hospitalización para la inmovilización y el cuidado de la herida, mientras el injerto va sanando. 

Suele ser conocido como procedimiento de colgajo, en el cual se mueve un colgajo de piel de un área a otra. Su nombre es Plastia en Z, puesto que la cicatriz final tiene tres extremidades en forma de Z. 

Aun cuando su aplicación puede ser requerida, su desventaja es que debe hacerse de manera muy agresiva para aplanar la hendidura glútea. Por otro lado, los resultados cosméticos no son muy atractivos, y si falla, es difícil de corregir secundariamente.

La Cirugía Pilonidal con Láser en Madrid es aplicada para tratar el problema del quiste o sinus pilonidal, el cual se produce cuando los folículos pilosos se infectan desarrollando un absceso Pilonidal, usualmente generando dolor, enrojecimiento de la piel, supuración de pus o sangre (de olor desagradable), fiebre y náuseas, entre otros síntomas

El tratamiento con láser de la enfermedad pilonidal consiste en una intervención ambulatoria y sin hospitalización, en el cual el médico especialista realiza una pequeña incisión en la piel, de 0.5 cm aproximadamente, y aplica una limpieza cuidadosa de las vías sinusales con una cureta. Acto seguido, procede a la aplicación de energía láser mediante una fibra radial conectada a un conjunto de Láser de diodo, el cual ha sido introducido en el tracto.

Esta cirugía con Láser puede aplicarse con anestesia general, que mantenga el paciente totalmente dormido o con anestesia regional, que le adormece de la cintura para abajo, siempre bajo la supervisión de un especialista en Coloproctología, encargado del diagnóstico y tratamiento de enfermedades del colon, recto y ano.