En diversos artículos hemos hablado sobre lo que puedes hacer si tienes un quiste pilonidal que te está molestando, pero nunca antes habíamos considerado compartirles cuáles son las medidas que puedes tomar para prevenir el sinus pilonidal.
Y es que este problema de salud es más frecuente de lo que se cree:
- Suele afectar a personas entre los 15 y 30 años de edad, en su mayoría hombres.
- Puede afectar hasta el 9% de la población mundial.
- Y, aunque menos frecuente, también puede aparecer en niños o adultos mayores a los 45 años.
Entonces, ¿es el quiste pilonidal un mal que se puede evitar?
Veamos lo que dicen nuestros expertos.
¿Es el sinus pilonidal una enfermedad que puede prevenirse?
Comenzaremos por decir que no es posible prever cuándo sí y cuándo no se desarrollará esta enfermedad.
Hasta ahora la ciencia afirma que el sinus pilonidal se forma cuando un pelo penetra en el tejido cutáneo y forma un quiste a su alrededor. Sin infección, este quiste no produce prácticamente ningún problema.
Ahora, en el momento en el que se infecta es cuando inician las verdaderas molestias.
Es importante destacar que, por ubicarse en una zona tan delicada (en medio del pliegue de las nalgas), existe una alta probabilidad de que el sinus se infecte.
Aclarado esto, podemos decir que prevenir el sinus pilonidal consiste en:
- Evaluar si eres una persona con riesgo a desarrollar la enfermedad, para duplicar los cuidados y evitar infecciones.
- Tener presente que la correcta higiene y cuidado de la región sacra será crucial para evitar la aparición de un quiste.
Ambos puntos los desglosamos a continuación…
¿Quiénes son más propensos a desarrollar un quiste pilonidal?
Existen una serie de factores de riesgo que pueden aumentar considerablemente la probabilidad de desarrollar un quiste sacro o pilonidal.
Estos factores son:
- Ser hombre y tener entre 15 y 30 años
- Que alguien de tu familia haya desarrollado el Sinus Pilonidal (SP)
- Vello corporal recio y fuerte (tanto corporal como capilar)
- Mucha presencia de pelo en el pliegue entre los glúteos
- Pasar mucho tiempo sentado o practicar alguna actividad que provoque fricción en esa zona
Lectura recomendada: ¿Cómo saber si sufres de Sinus Pilonidal?
- Haber recibido golpes en el coxis
- Que el pliegue entre los glúteos sea muy profundo
- Tendencia a que los poros de la piel se obstruyan (acné, forúnculos, quistes sebáceos, hidrosadenitis, entre otros)
- Tener un sistema inmune debilitado.
Como mencionamos en un inicio, los hombres son más propensos a desarrollar este problema, sin embargo, existen casos de quiste pilonidal en mujeres.
Hábitos que pueden ayudarte a prevenir el sinus pilonidal
Si quieres evitar que esta molesta condición aparezca estos son los pasos que debes incorporar a tu rutina diaria:
- Mantener una correcta higiene de la zona
Es importante que esta zona esté siempre limpia y seca, así que cuando te duches, asegúrate de lavar bien la zona con un jabón antibacterial y, al terminar, seca cuidadosamente el área.
- Evitar usar preguntas ajustadas o que provoquen fricción
Elige prendas que no molesten esta área y, si haces deporte con una prenda ajustada, aséate para eliminar el sudor y cambiate de ropa una vez terminado el entrenamiento.
- Si tienes mucho vello, recurrir a la depilación puede ser una buena alternativa
Si está en tus posibilidades, puedes depilar con láser la zona. Con cuchillas podría no ser suficiente para evitar que se desarrolle un quiste.
- Haz todo lo posible por moverte
La vida sedentaria es un factor de riesgo importante. Pasar demasiadas horas sentado puede aumentar la presión en la zona y con esto las probabilidad de desarrollar la enfermedad.
- Evita el sobrepeso
Las personas con sobrepeso tienden a sudar más y a tener más fricción en el pliegue de los glúteos y esto, sin duda, puede dar paso a los quistes pilonidales infectados.
Para evitarlo intenta mantenerte en movimiento y cuidar de tu salud, no sólo por el quiste pilonidal sino por el bienestar de todo tu cuerpo.
Lectura recomendada: Desmintiendo mitos sobre el sinus pilonidal.
Es importante destacar que aún con los cuidados correctos y una higiene adecuada, no existe garantía de prevención del 100%.
Y esto se debe, de nuevo, a que la región está muy expuesta a vellos y son estos vellos, junto a otros factores, los que provocan que el sinus se desarrolle.
Esta es la verdad: si puedes poner en práctica todos estos hábitos y cuidados es muy probable que nunca sufras de la enfermedad pilonidal.
¿Qué hacer si tengo un quiste pilonidal que se ha infectado?
Lo primero que vas a notar si tienes un quiste pilonidal infectado es hinchazón, dolor y enrojecimiento de la zona.
En algunos casos, es posible ver pus o exudación de sangre a través de alguna apertura de la piel y, cuando la infección es avanzada o grave, el paciente suele presentar fiebre.
En estos casos lo mejor que puedes hacer es buscar atención médica inmediata y por dos razones:
- Para tratar la infección del área (es importante que no empeore) y drenar el quiste
- Una vez superado el cuadro infeccioso, discutir con un experto la posibilidad de realizar la cirugía de Sinus pilonidal.
Y, ¿por qué hablamos de cirugía?
Porque un quiste pilonidal que se infecta y recibe tratamiento, en el futuro puede volver a infectarse. No una, sino muchas veces.
Para evitar ese problema lo mejor que puedes hacer es conversar con un experto en técnicas quirúrgicas para el sinus pilonidal, pedir que evalúe tu caso y considerar la cirugía como tratamiento a esta afección.
Pero ¿qué pasa si decides no ir al médico? Que la infección muy probablemente empeorará y el tejido afectado será más extenso.
Si notas un bulto extraño en el pliegue de los glúteos, presentar dolor, enrojecimiento o inflamación de la zona, te invitamos a hablar con el equipo de Innova Cirugía.
Expertos en el tratamiento del sinus pilonidal.
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